Astillas

No debe preocuparse por el daño que pueda causar una astilla enterrada sino el que puede causar usted haciéndose la cirujana. Normalmente es mejor dejar las astillas donde están que tratar de sacarlas, sobre todo si son pequeñas. Deje que el cuerpo haga su trabajo; en la mayoría de los casos la astilla sale sola o se desintegra al cabo de unos días. Al intentar sacarla, aumenta la probabilidad de que se inflame o se infecte. Si es una astilla grande y parece que está casi afuera, a lo mejor la puede sacar con una pinza. Si no, lleve al niño al médico, quien determinará si es necesario sacarla y si lo hace, será con la debida esterilización.

Las astillas suponen un pequeño riesgo de infección, lo mismo si se sacan que si se dejan dentro, pero se puede prevenir poniendo compresas tibias y una crema antibiótica. Si nota un aumento del enrojecimiento, pus o inflamación, pudiera ser necesario drenar el pus o tomar un antibiótico.